 |
| Justo Luperón (Frank Adolfo) |
ORACIÓN CONTESTADA
Querido hermanos en la fe
Buen día, maravilloso. Regalo del Padre Bueno. Amén
Un humilde filántropo, amado amigo desde la infancia, Yorik Piña, me dijo en un interesante momento, unas expresiones sabias, que aún retosan en un recuerdo aleccionador.
Corría el tiempo en el cual se iniciaban los trabajos para lanzar, la Expo-Feria Barahona y quise invitar como figura central, a pesar de que había invitado todas las autoridades influyentes de la época en la "Perla del Sur", Barahona, el Síndico recién electo, Senador, Diputados, gobernador, otros funcionarios y personalidades destacadas del entorno político, social, deportivo y educativo de la provincia. Sin embargo, por esa humildad que siempre ha caracterizado a mi amado amigo, quería hacer en su presencia un testimonio sincero, justo, de cuanto he apreciado su labor desprendida por los que sin rostro ni presencia y despojados de bienes materiales, espirituales y educativos luchan por un espacio dentro de una sociedad hostil, que niega techo, comida y pan de la enseñanza, un sector marginado de la población que nos ha tocado en suerte vivir para dar testimonio de estas cosas, tal cual hago en este instante.
Quise rendir un homenaje a Yorik Piña como un héroe esencial que trabaja por su comunidad denodadamente (a las pruebas me remito) sin marcar tiempo ni pausa. El me respondió cuando le expuse la intención: - ¿Por qué recibir un reconocimiento por hacer las cosas que debo hacer?. Las hago, porque es un compromiso con la sociedad y mi Dios que auxilia mis oraciones. El proveé.
Realmente esta demostración de firmeza en sus creencias, me impactó tremendamente. Igual hice el homenaje. Fue la figura central de todos los actos, hasta Fort George, estuvo participando, pues celebramos un servicio para los efectos, de las festividades en nuestra Casa de Oración con la asistencia de una nutrida delegación de visitantes allende los mares, ubicados en la "Perla del Sur", Barahona, como se le suele llamar a este terruño de la Rep. Dominicana.
Los héroes esenciales son aquellos, todos, los que están señalados para hacer una labor que es de su obligación; pero la diferencia a ser un empleado, que recibe un emolumento por el servicio y tiempo que es obligatorio realizar, dedican un valor agregado y se esfuerzan por dar al máximo sus potencialidades sin esperar nada a cambio. No es su obligación, ese esfuerzo. Ese significativo valor agregado. No. Si es lo que brilla, reconocemos y destacamos.
Por eso es una oración contestada cuando un médico saca a flote un paciente en estado crítico. Un policía se juega la vida al exponerse a conflicto imprevisto, y otros servidores de la sociedad en valores y calidad de entrega por su gente, incluyendo los pastores de alma y administradores de la fe cristiana.
En verdad, creo qué, los héroes esenciales, son una oración contestada en los labios del creyente dentro de las comunidades de fe en todo el orbe. Nos inspiramos en Efesios 6:18: "No dejen ustedes de orar: rueguen y pidan a Dios siempre, guiados por el Espíritu. Manténganse alerta, sin desanimarse, y oren por todo el pueblo santo."
Amén. Alabado sea el nombre del Señor.
