Por Yorik Piña
En una conferencia que he dictado en el
Hotel Lina, New York, New Jersey, universidades y en varias ciudades de República
Dominicana, hago un símil entre el fenómeno de la delincuencia y una botella
cualquiera y su contenido.
Cito:
"En este asunto, el Delincuente es
el continente (la botella). Continente es una cosa que contiene, en sí, a otra. La Delincuencia es el contenido, la
cualidad del delincuente, es la manera de ser.
Para rehabilitar al delincuente o al adicto a las drogas se debe modificar el contenido, su manera de ser. El delincuente es el recipiente de la delincuencia. El delincuente es una consecuencia del la delincuencia".
Termina la cita.
Repito que la botella es el delincuente y el contenido su manera de ser. Si el contenido es agua y la bebes, no hace daño; si es jugo de naranja, tampoco lo hace; pero si es alcohol y lo bebes, te emborrachas y puedes morir; si es veneno, muerte segura.
Son los maestros, los vecinos y amigos y
sobre todo los padres los que vierten el contenido en la botella (sus hijos y
alumnos), la manera de ser, basados en la formación que ofrecen.
Es la sociedad que vierte el contenido
en la botella. La botella no es responsable de lo que vierten los adultos del
entorno. Yo odio la delincuencia y la drogadicción ; pero trato de rescatar las
victimas de una mala formación que ha provocado su manera de ser (delincuentes y adictos)
Usted puede estar de acuerdo o no
conmigo; pero respete el derecho que tengo de reflexionar y hacer lo que pienso
como profesional de la conducta, lo que es correcto.
El programa que aplico en Barahona es producto de experiencias previas en el Colegio Experimental FAME, de hace 50 años.
¿Como hubiera sido la vida de muchos
de esos jóvenes que bebieron de las aguas del FAME, si no hubiera existido ese centro
formativo? La escuela dominicana no forma, solo informa.
Colegio FAME- Barahona |
Hago un llamado a los ex alumnos del Colegio FAME de Barahona y FAME y el Experimental De Monitores de Santo Domingo que apoyen este esfuerzo de sacar del fango de la formación inadecuada a decenas de adolescentes y jóvenes atrapados en las redes del delito y los vicios.
La sociedad (hogar escuela, vecindario) por ignorancia los genera. Intentamos enmendar el error.
No es mi responsabilidad; pero como profesional de la conducta, conocedor de la génesis, no puedo quedarme de brazos cruzados. No hay balas suficientes para acabarlos. La fábrica (el hogar, la escuela y el vecindario) siguen generando delincuentes y adictos a las drogas. No hay políticas de Estado serias para disminuir el problema.
Estamos en disposición, sin cobrar un solo centavo, de adiestrar grupos de facilitadores, en cada municipio del país para masificar el "Programa De Reeducación Para Jóvenes Traviesos". Para el Estado Dominicano es poca cosa, para mi es demasiado trabajo y gastos de recursos económicos. Mientras tanto sigo en Barahona.
HERRARE HUMANUM EST
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Barahoneros y visitantes: apreciamos sus comentarios