El pasado
lunes e del cursante mes de febrero, a 15 años de la revolución bolivariana,
visitó la ciudad de Barahona el canciller de la hermana República Bolivariana
de Venezuela Elías Jaua Milano en compañía de dos pilotos, un mecánico de avión
y una amplia comitiva.
El
embajador de ese país en la República Dominicana, Alberto Efraín Castellar Padilla,
ya conocido en Barahona, me invitó para que sea parte de la comitiva de
recibimiento, en mi calidad de coordinador del Comité Barahonero Provisional de
Solidaridad con Venezuela.
Temprano en
la mañana nos dirigimos al aeropuerto internacional María Montez, lugar en el
que aterrizó el avión venezolano que trajo al Canciller Elías Jaua Milano y su comitiva y en compañía
del embajador Alberto Efraín Castellar Padilla, después de una breve espera en
el salón habilitado para tales fines, con las atenciones cordiales del personal
y en especial de la administradora, fuimos a la pista de aterrizaje.
Allí al
bajar las escalinata y tras los saludos de rigor intercambiamos impresiones
sobre el aeropuerto, nuestro país, Venezuela y la solidaridad.
Ingresamos
de nuevo al salón para tomar un café, agua y un juguito, en lo que se preparaba
el viaje por tierra a Jimaní, lugar en el que se celebraba la segunda cumbre de
negociaciones entre Haití y la República Dominicana, en la que el canciller
participaría como observador.
Allí siguió
el intercambio de ideas, luego corroborado por los pilotos y parte de la
comitiva sobre lo bueno que es el aeropuerto y el por qué no se le da uso,
sobre la belleza de Barahona y el por qué no se ha desarrollado.
Este
criterio sigue dando valor de verdad a los que dicen medios de prensa
internacionales sobre nuestra provincia, ubicándola en un lugar privilegiado
para visitar en este año 2014, y yo digo: todo el tiempo.
Uno de los
pilotos me dijo que su padre visitó y vivió un corto tiempo el municipio de
Enriquillo y que le habló de nuestras bellezas naturales y la bravura de sus
hombres.
Casi a
todos estos visitantes les reservé habitaciones en el hotel Costa Larimar,
quedando encantados de sus servicios y en especial de sus atenciones.
Pienso que
se abre una nueva puerta a Barahona, que debemos aprovechar al máximo, con la
relación que cultivamos con los venezolanos y en especial con esta visita
del canciller de Venezuela Elías Jaua
Milano a Barahona.
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