Luis Matos |
Por Luis Matos
Presentemos lo que ya hicimos y continuemos con lo que debemos hacer.
Con pena miro las publicaciones de algunos de
los barahoneros que hacemos vida por medio de los blogues
digitales.
Como queremos desarrollar turismo, si antes de lograrlo disparamos a
destruir. Como hablar de un desarrollo que limitamos con nuestras acciones y
actitudes.
En
ciertas publicaciones de los informativos digitales, vemos como solo se presenta el lado oscuro de
nuestra provincia. Creo que, en verdad, no hay malas intenciones, sino el amor que
tenemos al pueblo. Eso nos hace
accionar, y denostamos. En vez de ayudar al desarrollo, dañamos nuestra imagen
ante el mundo.
Las
publicaciones que se hacen sobre las
necesidades del pueblo y las
continuas informaciones negativas
del desarrollo de la comunidad de Barahona que se está desatando por los medios
digitales, en vez de ayudarnos nos están estropeando la oportunidad que tanto
deseamos y queremos para la región.
Vamos
a indagar sobre las cosas que sean positiva con fines de contribuir a la afluencia
del turista no solo el nativo; sino del que no sabe que existimos en la región Sur
de esta nación. Debemos dar ejemplo de grandeza
cuando algún visitante de cualquier parte del mundo nos visite y, al retorno, tenga la mejor de las impresiones
del gran Barahona como destino turístico de recreación y aventura, en esta
Nación.
La basura debemos barrerla
hacia dentro con la finalidad de poder crecer internacionalmente.
A veces me pregunto, ¿por
qué el desacuerdo entre personas que tienen las mismas metas y ambiciones
para el desarrollo de su pueblo?, No lo pueden debatir en un plano amistoso en
beneficio de la comunidad?. O es que no hay tal intención del desarrollo y en
verdad lo que se quiere es adquirir un protagonismo individual?. Por qué sólo se señala la parte negativa de
los hechos con fines de ser la luz sin fuego que brille entre los
que quieren un desarrollo sostenible para la mal llamada región del sur
profundo.
Si por mantener este
protagonismo interno entre nosotros,
continuamos aceptando que nos caractericen y nos identifiquen como sur
profundo, sometiéndonos así a la miseria del país, entonces si seremos los
culpables de que la región no progrese por la falta de acuerdo de los que están
y no son y los que son y no están.
En mi reciente viaje a mi natal
Barahona, en una charla que intercambiamos, el Dr., Edgar Augusto Feliz Méndez
y este servidor, apuntalábamos un tema que se
discute mucho entre los que, de una manera u otra, hacemos vida fuera
del terruño de Barahona y los que aun
pernoctan en la ciudad: los que estamos
fuera culpamos a los que aún están de no hacer nada por el pueblo. Y la verdad que reconocer la falta en los que
están, sin admitir las de los que se fueron, no es justo. Aceptando esa afirmación como buena y valida,
me pregunto: los que hoy residimos
fuera, hemos hecho esfuerzo alguno para el desarrollo de la región o tenemos
razón para criticar o señalar los que aún continúan en el pueblo?.
La verdad, creo que no. Es muy
poco los que hacemos y cuando regresamos es muchos lo que queremos sin aportar
nada. Sólo exigimos, sin reconocer la labor continua que están desarrollando,
desde diferentes ámbitos los que hoy
forman las sociedades en desarrollo de la región.
En algunos casos me he sentido
hasta molesto con compueblanos cuando les escucho decir que ya no es lo mismo porque ellos
esperaban que a su regreso, el tiempo se detuviera para que todo fuera tal y
como lo dejamos. Una expresión muy común en nuestros hermanos barahoneros.
Pero incapaces de decirse a sí mismo
que de acuerdo a como ellos han crecido los demás también están en las
condiciones de hacerlo.
El tiempo es dueño de su tiempo y
solo nos permite el tiempo de plantar algo a tiempo para que después de mi
tiempo le reconozcan como pasé en el tiempo. Hagamos en este tiempo bien a
tiempo y así nos iremos como nos trajo el tiempo. Todos haremos el tiempo al
tiempo de progreso de Barahona. No mas desinformaciones que nos retrasan el buen tiempo.
Cuantas verdades en un sólo articulo mi estimado Luis. Saludos. Eladio Uribe
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