Por Héctor Rafael Cuello V.
Queridos barahoneros: Para mí la fiesta quedó bien, no fue perfecta, pero cumplió su cometido, que fue juntar a los barahoneros de allá con los de aquí.
Se suspendieron uno o dos eventos por razones que no vienen al caso, pero en un 90 % las cosas salieron bien. No pude participar en todas las reuniones porque estoy residiendo en los alrededores de Beacon,N.Y., y eso queda como a hora y media de la ciudad, además, el dolor de espaldas que padezco me tiene muy limitado de movimiento, aunque estoy un poquito mejor.
Debo decirles que varias personas de diferentes grupos se me acercaron para contarme chismes y mal querencias, creo que por eso los barahoneros no avanzamos. Algunos sintieron que los dejaron fuera de la organización de las fiestas, creo que de ahí vienen los comentarios que han estado circulando sobre si las fiestas fueron un éxito o un fracaso. También escuché de celos políticos, algunos decían que se le prestaba más atención a las personas de un partido que a las de otro. Por eso no me gusta participar en vainas donde hayan políticos.
Creo que el Señor Justo Luperón (Frank Adolfo) debe conformar un grupo de personas que lo ayuden con la organización del próximo evento, ya que creo es mucho trabajo para una o dos personas, creo que eso produjo algunas fallas de logística y organización.
Creo que esa reunión de hermanos debe continuar en los años por venir y constituirse en una institución barahonera. Los barahoneros tenemos que aprender a trabajar juntos en beneficio de nuestro pueblo, mientras eso no ocurra seguiremos sumidos en el desorden y el atraso.
Quiero felicitar al señor Justo Luperón por tomarse la molestia y hacer el sacrificio de organizar un evento como ese, en una ciudad tan complicada como New York, y a todos los que le acompañaron en esta maravillosa reunión de compoblanos, que si no es así, pasan años sin verse viviendo en la misma ciudad o los alrededores.
Un abrazo a Frank Jímenez por sus atenciones y por el cariño que me manifestó. Éste fue el segundo año de estas fiestas, hay otras que se hacen por décadas y tienen decenas de fallas, en la nuestra hubieron fallas, pero fueron menores. Creo que en vez de llamar a que se le retire el apoyo deberíamos abogar para que el año que viene la ayuda sea mayor y que todos los que puedan pongan su granito de arena para que esta fiesta sea perfecta o casi perfecta.
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