Por Pedro Ruiz
Señores es inconcebible la
actitud que han asumido los miembros directivos del Centro Deportivo y Cultural
María Montez, que de cultural no tienen ni la C, estos para mi humilde entender
se han dedicado a la tarea de boicotear toda actividad que tienda a buscar el
bienestar y desarrollo de nuestro pueblo.
Pedro Ruiz |
Esto provoco que los miembros de
ese Centro se incomodaran y optaron por abandonar la reunión, argumentando al
final “que ellos no participaban en ningún estamento donde este
incluido el señor FRANK ADOLFO”, manifestando con esto las diferencias
personales de ellos con FRANK. Esta posición del María Montez era totalmente
desconocida por nosotros.
La intención esa noche del CCDMM
según pudimos colegir era apoderarse del comité de festejo, motivo por el cual
llevaron una batería de personas y algunos al final votaron en su contra. Este
boicot provoco que no se celebraran las Fiestas Patronales en Nueva York.
Pero eso no es todo, donde ellos
le pusieron la tapa al pomo, fue en la actividad del sábado pasado donde se
puso en circulación el Sello Conmemorativo al Centenario del Nacimiento de
nuestra María Montez. Para este acto celebrado en los salones del Comisionado
de Cultura de la Republica Dominicana en Nueva York, vinieron desde santo
domingo una nutrida delegación encabezada por el honorable Gobernador Ing.
Pedro Peña Rubio e integrada por el doctor Julio Vargas, el arquitecto
Julio Osorio, el Dr. Wilson Gómez, Presidente de Alianza Barahonera y Juez del
Tribunal Constitucional, además del licenciado Virgilio Gautreaux Piñeiro y la
señora Atala Lluberes, representante del director del Ispodom.
Estos señores del CCDMM, no
respetaron la solemnidad del acto, ni la investidura de las personas que
integraban la mesa directiva. En este encuentro se presento un
percance, pues, el acto estaba programado para iniciar a las 2.PM, pero el que
estaba designado para maestro de ceremonia el señor Alsy Pimentel, se presento
a las 4:07 pm. Y el comité organizador opto en poner a Frank Adolfo como
maestro de ceremonia en lugar de este, decisión esta que molestó a los
directivos del María Montez quienes hicieron lo mismo que en el encuentro
anterior y conminaron a sus gentes a abandonar el local, sin
importarles que estaban cometiendo un acto bochornoso e irrespetuoso contra la
delegación y todo el que estaba allí presente. Esta actitud fue
catalogada de boicot, ya que no se conformaron con abandonar el local, sino que
bajaron y le impidieron subir a la que iban llegando para participar del acto.
Con esta posición estos señores demostraron una gran dosis de mediocridad y
falta de visión en relación a como manejarse en situaciones de esta naturaleza.
Por todo lo aquí expuesto, hago
un llamado a la Comunidad Barahonera en Nueva York y Estados vecinos a exigirle
al Club María Montez, a que convoquen a un asamblea lo mas rápido posible para
dilucidar todos estos problemas que vienen ocasionando, los que hoy mal dirigen
el María Montez. Es tiempo ya que estos “mandamás” liberen el nombre de María Montez
del secuestro a que lo tiene sometido.
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