lunes, 30 de junio de 2014

AL MAESTRO Y LA MAESTRA EN SU DIA

El 30 de junio fue declarado día del maestro y digo yo, de la maestra. Juan Bosch está en el epicentro de tal decisión y con él todos los maestros y maestras que le antecedieron, le fueron contemporáneos y le han seguido.

El maestro otrora semi Dios, ha desaparecido, el respeto hacia el maestro ha disminuido y la protección estatal no se siente con efectividad, se habla de todo, se mejora la infraestructura de la educación, se hace énfasis en la tanda extendida, el desayuno escolar, etc… pero al momento de hablar de mejorar las condiciones de vida del maestro, de aportar a su actualización, la puerca tuerce el rabo.

Yo nunca imaginé que u alumno tirara piedra a un maestro, que le sacara chilena, que lo hiriera con arma blanca y todo eso se ha visto, lo que habla de la descomposición social en general y el deterioro de las relaciones entre los actores del drama educativo. La gravedad del caso es mayor con las agresiones entre estudiantes y los conflictos con el personal administrativo, lo que debe ser superado en una relación de hermandad y compañerismo en la comunidad educativa.

Tampoco imaginé que el estado dejara morir tantos maestros por no atender adecuadamente el seguro médico y los servicios de salud de los maestros. Me ha causado profunda pena y dolor ver sufrir a tantos educadores por el deterioro de su salud, sin tener los recursos para hacer frente a sus dolencias.

También me ha causado rabia ver que el Estado Dominicano, particularmente la justicia, no hacen lo que manda la ley frente a los atropellos, los ultrajes, las heridas y las muestres de nuestros educadores, como si no fuesen seres humanos, con iguales derechos que todos los ciudadanos.

Eso es lo que pasa en Barahona con los casos de la profesora  Lolina y de la profesora Angela, dos trabajadoras de la educación consagradas, asesinadas, sin que se haga la justicia que establece la ley, ni la justicia que espera la sociedad barahonera y dominicana.

En el caso de Lolina hay una total impunidad, en el caso de Ángela hay una complicidad, una amañada aplicación de la ley para proteger a los agentes policiales que la asesinaron al lado de su casa, sin ofender a nadie, sin causarle daño a nadie, como vivió toda su vida, luchando por los demás.

Es tiempo de que en estos casos se actúe con seriedad, con responsabilidad, investigando a fondo el caso de Lolina, deteniendo a los culpables y aplicándole todo el peso de la ley, en el caso de Angela es necesario que el caso sea reencausado, no es posible que un hecho así sea tratado como homicidio involuntario y que uno de los dos agentes policiales sea sacado del expediente, como ocurrió en Barahona, a lo mejor por complacencia del ministerio público con la policía o con los agentes policiales que habían mandado desde la Fiscalía a buscar un preso al cuartel Villa Estela.

Volviendo al Estado y la condición de los educadores, esperamos que se haga conciencia y que al preparar el próximo presupuesto, 2015, se contemplen partidas para casas, apartamentos, perfeccionamiento docente, recreación, tecnología, etc… a favor maestros y maestras.

En nombre de la Alianza por el Rescate de Barahona y en el mío propio, felicitamos a todos los educadores y educadoras, le acompañaremos en los actos en su  honor, siempre estaremos a su lado y en especial cada 30 de junio, porque no hay fuerza humana que nos haga olvidar a esos seres especiales, mucho menos en su día.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Barahoneros y visitantes: apreciamos sus comentarios